Las Migraciones y sus Consecuencias

Todos conocemos a alguien que se ha mudado a otro país. Puede que se haya mudado por necesidad, por que se les presentó una mejor oportunidad en un país diferente, o simplemente por que es un país que les parece atractivo ya sea por su cultura, su geografía, su clima, etc.

Los emigrantes abandonan sus país de origen, y los inmigrantes son los que recibe el país de destino.  En la actualidad, el país con mayor tasa de emigración es India, y el país con mayor tasa de inmigración es Estados Unidos. 

En cuanto a los efectos de esto, en los países en vías de desarrollo, la emigración suele ser mano de obra no cualificada, por lo que en estos países la mano de obra no cualificada disminuye.  En los países desarrollados, la mano de obra no cualificada aumenta. Esto causa un aumento de los salarios de la mano de obra no cualificada en los países pobres, y una disminución de los salarios de la mano de obra no cualificada en los países ricos. 

Aún así, la emigración de mano de obra de no cualificada no es la única que hay. Hay muchos países que ofrecen una formación de buena calidad, pero la situación laboral no es ideal, por lo que se produce una emigración de obra de mano cualificada en busca de mejores salarios, condiciones laborales, y calidad de vida en general. 

La emigración beneficia a los países receptores debido a que estos contribuyen al PIB pagando los impuestos de los productos y con el trabajo que realizan. Además, la llegada de inmigrantes puede suponer la explotación de nuevas ideas en el mercado del país receptor, como por ejemplo, abrir un restaurante de comida india auténtica en España.

Es verdad que a veces con la inmigración pueden venir problemas, ya sea por la xenofobia del país receptor o por acciones de los emigrantes en el país receptor, pero al final, la emigración enriquece la cultura de los países receptores, y las ideas que pueden aportar los emigrantes y el intercambio de conocimientos va a ser infinitamente beneficioso para el país y su economía.